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miércoles, 27 de febrero de 2019

La ciudad sigue dormida

Cuando tú lloras,
la ciudad sigue dormida.
Las luces de las farolas
parpadean.
Un gato negro cruza la calle.
Todos los semáforos están en verdes,
pero ningún coche recorre el asfalto.
El viento silba
y rompe el silencio de la noche.

Cuando tú lloras,
la ciudad sigue dormida.
Pero hay una pareja haciendo el amor.
Un niño leyendo un libro a escondidas.
Dos personas desconocidas besándose
en la esquina.
Un pintor renunciando a su arte
y planchando el traje para la oficina.
Un músico rasgando las cuerdas de su guitarra
hasta romperlas
hasta dejar de hacer música.
Aquel matrimonio del edificio gris
lleva semanas durmiendo separados.
La chica que te sonríe en el bus
aún abraza la foto de su amor
aunque hace hace años de que se fue
—para no volver—.

Cuando tú lloras,
la ciudad sigue dormida.
La noche es más oscura.
El sueño más profundo.
El tiempo se echa una carrera.
Y el soñador comienza a tener pesadillas.

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