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sábado, 13 de septiembre de 2014

Nada.

Todo comienza cuando el bello se te eriza, mientras que él te recorre con la mirada, te empiezas a sentir desnuda y un fuego empieza arder en tu interior, al segundo después,  comienza a sonar de fondo una canción que no tienes ni puñetera idea de como se llama, pero aún así, comienzas a tararear la letra para tus adentros. En tu mente solo resopla un 'tarara' para relajar que el calor no estalle en tus mejillas; No sabes que te está pasando y le empiezas a echar la culpa a la copa de vino tinto. Notas que te sigue mirando, con toda sutileza giras la cabeza para confirmas tus sospechas, y sí, te estaba mirando y no puedes evitar que te salga una leve sonrisa vergonzosa, pero sabes que te encanta sentirte deseada, y te sientes más hermosa que nunca.
La canción que suena es diferente a la anterior, ves como todo el mundo baila mientras que te aferras a lucir una sonrisa perfecta con tus labios rojos del número tres; asientes con la cabeza para mostrar un mínimo de atención. Notas que alguien se acerca, sientes otra vez como se desencadena un fuego interno, te pones nerviosa, empiezas a marcar el ritmo de la canción con los dedos mientras que sostienes la copa. 
Te das cuenta de que esta vez no te mira, que sigue recto, que va hacia el final de la sala, al otro lado de la pista de baile, y te das cuenta como se acelera su paso en mitad del camino, vez como se pone nervioso, ves como coge a una chica preciosa de la cintura, y ves como la cola del vestido de brillos esta revoloteando en aire mientras que él le da vueltas y la besa.